domingo, 29 de diciembre de 2013

Poema poemoso

Un poema poemoso,
que es muy canoso,
porque lo escribió un oso,
hace muchos días.

Un poema poemoso,
húmedo y mugroso,
porque era un domingo lluvioso,
y nada lo cubría.

Un poema poemoso,
arrugado y borroso,
porque lo tiraron a un foso,
pensando que ya no valía.
                                       Alberto Santín

Esforzo

O ceo non é o límite
loita polo que queres
loita polo que eres
pode que o resultado non sexa seguro
pero non duvides que a paz interior o sexa
desexote o mellor
traballa, se forte, non digas non.
                                                          Juan Albaladejo

Soidade

Temos que estar sós
aproveitar da soidade
estar cun mesmo.
Porque ó final morremos sós
Porque non existen tumbas de dous?
Porque o adeus sintese en vea?
Amamos o que perdimos
queremos o que envenena
                                                                 Juan Albaladejo

II

Sonido en mente
corazón ardiente
lágrimas de gente
tensión presente.
                              Marta Estévez

I

Volver,
a caer.
Volver,
a sufrir.
Salir,
de allí.
Pensar,
en tí.
                      Marta Estévez.

Bebiendo un mosto descorchado III

Hace tiempo mi amor
Que la Luna no brilla, cuando llega la noche
Hace tiempo mi amor
que la luz no entra por mi ventana
cuando llega la mañana.
                                                                                Juan Albaladejo

Bebiendo un mosto descorchado II

Empiezo a creer que...
Empiezo a pensar que...
No hay un solo día
que no quiera verte.
              Juan Albaladejo

Bebiendo un mosto descorchado I

Fue nada más verte
por verte a diario.
No fue un accidente.
No existe el destino.
Fue tan solo suerte.
Fue solo un milagro.
No hay otra razón que le puedo dar.
Es tu movimiento que me lleva a otro lugar.
                                                                                      Juan Albaladejo

IV

Nunca supe de tal dolor
como ese estallido en mi corazón
parecía una bomba de relojería
solo hacía "tic-tac" en mi vida.
                      Nuevo Becquer
                           (Santiago martinoli)

III

El pasado sirve para aprender
El presente para no volver
y el futuro no hacer lo
que hiciste ayer
                  Nuevo Bécquer 
                       (Santiago Martinoli)

II

Ella ha llegado
no sé bien de su pasado
pero solo es cuestión de hablar 
para que el amor vuelva a triunfar.
                                                     Nuevo Bécquer
                                                              (Santiago Martinoli)

miércoles, 18 de diciembre de 2013

I

Dos o tres días a la semana
miro el movil y no veo su llamada
no se que hacer amor...
arréglame el corazón, 
por favor.
              Nuevo Becquer
                 (Santiago Martinoli)

En el muelle.

Mi familia me despedía
aquel extraño día
¡Ay soledad fría!
¡Nunca más los vería!
           David.F.A & Santiago.L

Horizonte.

Allá donde el mar y el cielo
se unen al fondo del firmamento,
llevado sobre alas del viento,
querría yo en un momento
llegar y expresar lo que siento
libre de los lazos del viento.
                   David.F.A & Santiago.L

II

Fueron dos desconocidos
que se encontraron.
Fueron grandes amigos
que después se enamoraron.

                                         Faina Gómez

I

El cristal de mi ventana
lo empaño con mi aliento
en él escribo tu nombre
y luego lo borro a besos.

Faina Gómez

I

Bello es el amor,
palabra y sentimiento en el corazón,
supone fuerza, trabajo y pasión,
pero como poeta es mi inspiración.

                       David Espronceda de Castro
                       (David Fernández Novo)

Poenam de vida.

Noche que se pone en la ciudad,
el pueblo se desvanece,
se creen que la oscuridad
los secretos oculta la gente.

Más secretos hay de los que tu piensas
mas una sola disculpa,
¿Mea culpa?

Reflexionemos
¿Es mejor vivir con secretos...
a realmente vivir sin miedo?
                                Jaime mendez
                                   (Jacobo Martín)

Tengo miedo.

Tengo miedo de mí, 
del mundo, del aire,
del amor, de la sombra.
¡Tengo miedo del miedo!
Tengo miedo a caer
sin memoria y sin cuerpo.
¿Para que soy
si dejare de serlo?
                 Carlos Zorrilla
                       (Carlos Coladas)

III Despedida.

Con fuerza se apretaban la mano,
la espera se hacía larga.
Un abrazo acortó el tiempo,
y se congeló aquel momento.

No querían separarse,
temían al olvido.
No querían despedirse,
su amor los había unido.
                    Laura Álvarez

martes, 17 de diciembre de 2013

IV

Cada vez que me duermo
pienso a donde fuiste a parar
a una hurna de madera
sin vistas hacia algún lugar.

En un piso pequeño y deshecho,
en un lugar oscuro y triste,
recuerdo el momento con sufrimiento y dolor,
en el que te moriste.

Pensando en ti lloro,
pensando en ti, solo.
El pasado ya no volverá, 
pero ojalá lo pudiese recuperar.

Tu pelo oscuro, cobrizo y rizado,
como si del otoño se tratase,
es,cada vez, mi deseo más soñado.
Dios, ¿por qué te la llevaste?
                                 Nicolás Álvarez

III

Desesperación,
eso es lo que sientes
cuando piensas que misión
en esta vida tienes.

Un futuro oscuro o esperanzador,
no lo sé,
solo espero que no me faltes tú,
mi amor.

No sé lo que haría
o por que calles andaría 
sin rumbo y sin ti,
mi amor.
                                  Nicolás Álvarez

III Extiendo mis manos.

Extiendo mis manos hacia ti,
no estés, te lo ruego, lejos de mí.
Cuando escucho desde el infierno tu risa,
cuando diviso de lejos tu sonrisa
inigualable, toda entera, amada mía,
se conmueve el alma mía.

Otros amores sin duda tendrás,
pero quiero que sepas que, como yo,
así nunca nadie te querrá.
 
                                    Santiago Lillo

II

Nos quejamos de la monotonía
pero es la rutina que nos salva.
No valemos para cambios, 
en verdad, nos somos nada. 

Adoramos personajes creados
por el éxito y la fama.
No amamos lo real,
solo la salida rápida.

Buscamos en los recuerdos 
un hogar donde escondernos,
escapar del mundo.
Perdernos.
                                                                                       
                                    María Costa de Dios

I


Ella muere cada día,
lo sé por como mira.
Se clava como cristales 
que suelta en cada sonrisa.

Ella vive, sí.
¿Pero está viva?

Si cada vez que respira, se contamina.
Si tropieza cada vez que camina.
Si llora dos veces por cada alegría.
Si todos los días vuelve a casa vacía.
Si en nadie confía.

Sin duda, vive.
Pero eso no es vida.
             
                                                              María Costa de Dios.

II Sueños rotos.

Siempre busco en el silencio,
aquella lágrima del camino.
Porque la vida no es más que un deseo,
El deseo que quiero y admiro.

Y aún así en cada batalla, 
prometo no derrumbarme.
Soy joven, no busco un futuro
sin un presente inquietante.
                      Beatriz Muñoz Diez

I Galicia.

Entre árbol y árbol
se enconden las hojas,
nunca llegarán a saber los pájaros
quién las despoja.

No busquéis otros paisajes,
hay unos que yo me sé de maravilla.
Allí a lo lejos el Puente de Rande,
embellece la enorme Galicia.
                   Beatriz Muñoz Diez

I Sin música.

La vida sin música sería lisa,
como un mar sin olas,
o una niña sin sonrisa.

La vida sin música sería diferente,
como un niño sin juguete,
o una alegría que no se siente.

 La vida sin música sería un error, 
como un pájaro sin,
o un verano sin calor.
                       Laura Álvarez

II Lágrima por sonrisa.

Ríe cuando todos ven,
llora cuando nadie mira.
Alegría pocos tienen,
pero tristeza todos guardan.

Las sonrisas bien mienten,
pero las lágrimas nada ocultan.

                                           Laura Álvarez

viernes, 13 de diciembre de 2013

I Navegante


Da comienzo el Sol 
su diaria carrera
e incendiando las nocturnas sombras
la historia humana observa.
Por el anchuroso mar,
buscando una patria nueva,
enfrentada a mil peligros
entre las olas navega
la débil embarcación
en la que con brío bregan
Teucro y sus compañeros,
los exiliados de Grecia.

Mirando el azul horizonte
el héroe piensa.
"He de fundar una ciudad
que algún no lejano día sea
el orgullo de la raza aquea.
Están rotas mis cadenas,
pagadas todas mis deudas, 
mis puertas de par abiertas,
¡he desplegado las velas!
Navego a todas partes,
¡dichosa mi suerte sea!"

                           Santiago Lillo

II La última parada


Una luz en el fondo del túnel,
donde la vida y la muerte se unen.
Hacia allí mi tren viaja,
allá donde la Tierra acaba
y los recuerdos se marchan.
Desnudo quedó mi ser
en la última estación.  
Me bajé en el andén
de la desesperación.
El bosque oscuro de la muerte
se incendió de repente.
Las puertas del Hades se abrieron
y, ante mí, había un mundo nuevo. 

                                            Santiago Lillo

III Extiendo mis manos.


Extiendo mis manos hacia ti,
no estés, te lo ruego, lejos de mí.
Cuando escucho desde el infierno tu risa,
cuando diviso de lejos tu sonrisa
inigualable, toda entera, amada mía,
se conmueve el alma mía.

Otros amores sin duda tendrás,
pero quiero que sepas que, como yo,
así nunca nadie te querrá.


                                                                                                Santiago Lillo